Todos los que tenemos perros pasamos tarde o temprano por la temida diarrea.
Te contamos lo esencial para que sepas qué hacer cuando ocurre y te ayudamos a buscar causas y evitarlas en el futuro.
1. ¿Cómo sé que mi perro tiene diarrea?
Hay más indicios de los que pensamos que indican que puede existir diarrea.
La frecuencia, la urgencia y las heces acuosas o sueltas son los signos clásicos, pero también lo es el esfuerzo.
Muchas personas confunden el estreñimiento con la diarrea porque pueden ver a su perro encorvado, pero podría estar teniendo un ataque de diarrea.
La diarrea altera las contracciones rítmicas normales y las sensaciones del tracto gastrointestinal, haciendo que el perro sienta la constante necesidad de defecar.
Esta es la razón por la que se está esforzándose.
Otros síntomas que pueden ir de la mano con la diarrea es el letargo, pérdida de apetito, fiebre y deshidratación.
Por lo general, las mascotas jóvenes y saludables tienen un solo episodio de heces sueltas o diarrea, sin mayores consecuencias, sin embargo, si tu perro tiene episodios crónicos de diarrea, corre el riesgo de debilitarse y enfermarse.
Los cachorros, los adultos de pequeño tamaño y perros senior tienen un alto riesgo de deshidratarse incluso durante un solo episodio de diarrea.
2. La diarrea es un síntoma, ¿Cuál es la causa?
Aunque hay un número de causas que acaban en un cuadro de diarrea, muchas de ellas relacionadas con enfermedades, te explicamos las más comunes.
Tu perro ha comido algo que no debía
Es la más común, la indiscriminación dietética o lo que es lo mismo que tu perro ha comido algo que no debía comer y su cuerpo quiere deshacerse de ello de inmediato.
Por este motivo la diarrea ocasional es muy común en los perros.
Mientras los gatos tienden a vomitar, mientras que los perros por desgracia tienden a tener problemas gastrointestinales y heces sueltas o liquidas.
La mayoría de los perros son comedores indiscriminados, mientras que los gatos son por norma general más selectivos sobre lo que comer.
Tu perro ha comido un objeto como un juguete o un palo
Si tu perro se come un palo o un juguete masticable, la diarrea o las heces sueltas intermitentes pueden ser el resultado.
En general, será siempre buena idea consultar el veterinario en estos casos si sospechas que se puede haber tragado un trozo importante más grande, ya que hasta que lo expulse puede seguir causando problemas..
Has realizado un cambio repentino en su dieta
Este caso es especialmente común en perros que se han alimentado largo tiempo con la misma comida.
Es una de las razones por las que recomendamos una amplia variedad en la dieta de tu peludo, de esta manera tendrá un tracto gastrointestinal fuerte y resistente, ya que estará acostumbrado a comer diferentes alimentos y no tendrá diarreas.
Si alimentamos a los perros con la misma comida diariamente, todos los días del año, y luego cambiamos de repente su dieta tendremos garantizada una diarrea.
Esto no es culpa de los diferentes alimentos, es porque el intestino de nuestro compañero solo sabe procesar un solo tipo de alimento, esto no es lo ideal en términos fisiológicos ni nutricionales.
3. Cuando la diarrea es causada por una enfermedad
Hay un número de enfermedades que tienen como uno de sus síntomas la diarrea.
Por eso es tan importante identificarla a tiempo y ver al veterinario si esta no es puntual o es aguda.
- Alergias o Intolerancias alimentarias: Muchas veces causada por la Enfermedad Inflamatoria Intestinal (IBD) o Síndrome del Intestino Irritable (IBS) es en realidad una respuesta a algo en la dieta.
- La pancreatitis, que es la inflamación del páncreas, tiene la diarrea como uno de sus síntomas.
- Las infecciones virales (por ejemplo: parvovirus) y bacterianas en el tracto gastrointestinal pueden causar diarrea.
- Parásitos como las guiardias pueden ser los culpables. Este parásito microscópico causa diarrea intermitente que puede ser difícil de diagnosticar.
- El estrés es otra causa de heces sueltas en algunas mascotas.
4. ¿Cuándo tengo que ir al veterinario?
Si tu perro parece estar bien y saludable después de un ataque de diarrea, simplemente hay que vigilarle durante unos días, pero es imperativo que le lleves al veterinario cuanto antes cuando:
- Si notas cualquier letargo, fiebre o cambio de comportamiento
- Si tiene episodios recurrentes de diarrea que no parecen mejorar, incluso aunque tu perro se encuentre bien
- Las diarreas duran más de 3 días
- Si notas sangre en sus heces o notas cualquier debilidad u otros síntomas junto con la diarrea.
Normalmente, el veterinario tratara la deshidratación con líquidos intravenosos o SQ (subcutáneos) si fuera necesario.
Adicionalmente, puede hacer pruebas fecales. Una prueba comprueba los antígenos y / o huevos de los parásitos, y la otra prueba de los agentes bacterianos o virales que causan diarrea.
Por último, si el origen parece ser una enfermedad, estás en las mejores manos para hacerle frente en un episodio temprano.
5. Remedios caseros para la diarrea leve
Si tu perro está sano, te recomendamos quitar la comida, no el agua, durante 12 horas (en perros medianos o grandes puede ser 24h)
Un ayuno a corto plazo da al tracto gastrointestinal una oportunidad para descansar, repararse y restaurarse.
Los tejidos sólo pueden curar cuando están descansando.
Transcurrido ese plazo hay que empezar con una dieta suave, idealmente empezando por la Sopa de Moro y luego siguiendo por el pavo o pollo triturado, hervido y sin grasa y calabaza cocida y hecha puré.
Evita el arroz…
Muchos veterinarios todavía recomiendan una dieta suave de carne picada y arroz.
No estamos muy de acuerdo con eso ya que, por un lado, la carne en general no es lo suficientemente magra, lo que puede empeorar el trastorno gastrointestinal.
Por el otro lado, el arroz es un carbohidrato muy almidonado que no solo tiende a fermentar en el tracto gastrointestinal sino también proporciona una fuente de alimento para bacterias oportunistas.
… usa calabaza en su lugar
La calabaza proporciona alrededor de 80% calorías y 7 gramos de fibra soluble por taza, en comparación con 1,2 gramos de fibra en una taza de arroz blanco cocido.
La fibra soluble (el tipo que se disuelve en agua para formar un gel viscoso) de la calabaza recubre y alivia el tracto gastrointestinal.
También retrasa el vaciado gástrico, retardando los tiempos de tránsito gastrointestinal y ayudando a revertir los efectos del aumento del peristaltismo.
Cuando los animales tienen diarrea, pueden perder electrolitos importantes, incluyendo el potasio, lo que los pone en riesgo de deshidratación.
La hipopotasemia, o bajos niveles de potasio, puede dar lugar a calambres, fatiga, debilidad e irregularidades de la frecuencia cardiaca, la calabaza pasa a ser una excelente fuente de potasio, con 505 miligramos de potasio de origen natural por taza.
La calabaza es también más segura para las mascotas diabéticas que el arroz y a la mayoría de los animales les encanta, incluyendo los gatos.
Lo ideal es mezclar el pavo o pollo con la calabaza a partes iguales y alimentar a su perro hasta que la diarrea se resuelva.
Si no se resuelve en unos tres días con una dieta suave, es hora de llamar al veterinario.
Otros remedios que viene bien tener por casa
También es recomendable tener a mano olmo resbaladizo o «slippery elm»
Es una fuente de fibra neutra que funciona muy bien para aliviar los episodios de diarrea.
También se llama «Pepto-Bismol natural» porque reduce la inflamación gastrointestinal y actúa como una fuente no irritante de fibra para aumentar las heces y disminuir el tiempo de tránsito gastrointestinal.
Puedes añadir un probiótico de buena calidad una vez que las heces empiezan a endurecerse.
Mucho dueños de mascotas tienen buena suerte con hierbas comunes como la menta, el hinojo o la manzanilla.
Estas son especialmente útiles para los cólicos y otros síntomas incómodos que vienen con diarrea.
6. Cómo prevenir las causas comunes de la diarrea
Si tu mascota es un cachorro, lo más probable es que albergue parásitos internos.
Si la madre tenía parásitos durante el embarazo, la camada también tendrá parásitos.
Cada parásito necesita un tratamiento diferente, no dejéis que vuestro veterinario os diga que con una desparasitación universal se eliminaran todos.
Pregunta al veterinario que parásito especifico tiene tu perro o gato antes de dar al animal un tratamiento inadecuado.
Hay que mantener las plantas de interior potencialmente tóxicas fuera del alcance de nuestras mascotas por su seguridad.
Los animales jóvenes son naturalmente curiosos acerca de su entorno, e investigan con su boca, por eso tenemos que tener mucho cuidado con lo que dejamos en cada estancia de la casa.
También es importante recoger cualquier alimento que caiga en el suelo.
Aunque los trastornos digestivos son parte de tener un perro o gato, una dieta suave y un calmante remedio a base de hierbas como el olmo resbaladizo suele hacer mucho más fácil la curación de la diarrea ocasional en perros y gatos.
7. La mejor prevención: cámbiale a una dieta natural
Para hacer fortalecer nada mejor que una dieta variada con una amplia variedad de alimentos con diferentes contenidos de nutrientes.
Esto fomenta un microbioma intestinal diversificado y hace que el sistema digestivo sea fuerte y resistente.
Hasta el 80% del sistema inmunológico de las mascotas se encuentra dentro del tracto gastrointestinal, por lo que cuanto más nos centramos en crearles una buena salud intestinal, más saludable estarán nuestros peludos.
Hoy en día no hay mejor alimentación y más beneficiosa para su flora intestinal que su comida natural cruda, o dieta BARF.
Esta se compone de multitud de ingredientes, principalmente carne, no procesados y sin cereales ni legumbres que el sistema digestivo de nuestros pequeños es capaz de identificar y aprovechar al máximo.
Para evitar la diarrea, mejor una transición lenta
Si deseamos alimentar a nuestra mascota con diferentes alimentos hay que hacer la transición lenta, sobre todo en el caso de peludos con el estómago sensible, ya que podemos provocar que acabe en con una fuerte diarrea en las urgencias de nuestro veterinario.
Una transición dietética lenta significa días o semanas para la mayoría de los perros.
Te recomendamos empezar por alimentar con el 10% de alimentos nuevos y con el 90% de alimento a sustituir (no en la misma toma).
A continuación observas cómo se encuentra tu perro y sobre todo cómo hace sus heces para, poco a poco, aumentar (20% alimento nuevo 80% alimento viejo, etc.) hasta conseguir cambiarle por completo su alimentación.
El proceso debe ser lo suficientemente lento como para que no se produzcan cambios intestinales.
Conclusiones
La diarrea es una condición común por la que muchos perros pasan y que en la mayoría de casos es leve y se puede tratar en casa.
No obstante, es importante familiarizarnos con los síntomas y causas comunes y saber muy bien cuándo hay que acudir al especialista
Por último, existe una manera de alimentar a nuestros perros (dieta barf) que ya está estudiado que crea microbiomas más diversos que otros alimentos como los piensos.
Cambiar a estos alimentos es, sin duda, una de las mejores decisiones que puedes tomar.
Editado por PUROMENU
