EFE
- Su dueño le había roto el cúbito de una paliza.
- También presentaba sangre residual en los pulmones por las patadas.
- Uno de los agentes ha acabado adoptando al perro.
Varios policías nacionales de Alicante han decidido pagar de su bolsillo una operación a un perro de 9 meses maltratado, cuyo dueño le había roto el cúbito y radio en una paliza, para evitar que el cachorro quedara cojo «de por vida».
Según han relatado a los periodistas estos agentes solidarios, el pasado martes 10 acudieron a una llamada por un supuesto maltrato animal en una vivienda de la calle Cerdá de Alicante, en el barrio de Altozano, y ya desde la calle vieron al propietario quitando los cristales de una ventana rota.
Según el agente Pedro Martínez, al subir al domicilio encontraron al cachorro tembloroso y con la pata colgando mientras que el dueño, de 29 años, les aseguraba que el animal, de pequeño tamaño, mestizo con uno de los padres pincher y de nombre Neymar, se había accidentado al ponerse contento cuando regresó a casa y golpearse contra la ventana.
Sin embargo, la veterinaria concluyó que las lesiones eran «incompatibles» con lo relatado por el propietario, que fue detenido y trasladado a comisaría para la apertura de diligencias, ya que no había restos de cristal en la pata.
Además, posteriormente se comprobó que también tenía fracturadas todas las falanges de una pata, así como sangre residual en los pulmones y el estómago dolorido, posiblemente por patadas.
El otro agente que actuó en el domicilio, Enrique González, ha explicado que la veterinaria a la que acudieron les expuso que o se le operaba o «se quedaba cojo de por vida» y que ante la disyuntiva ambos policías se comprometieron a pagar los costes de la intervención.
Uno de los agentes le adoptó
A través de un compañero del cuerpo (de nombre Óscar), finalmente el perro, que carecía de chip ni vacunas y del que se ha desentendido el dueño, ha sido adoptado por otro agente, Javier Francés, con quien vive desde hace tres días.
Francés, «apasionado de los animales» y relacionado con la asociación Asoka el Grande para la protección de mascotas, ha explicado que el cachorro estaba «asustado, desconfiado y dolorido» aunque con el paso de los días cada vez se muestra «más feliz».
«No puede caminar y a causa de la lesión en el estómago lleva tres días vomitando por lo que está a base de ‘potitos’, pero cada día se le ve mejor y habrá un final feliz», ha afirmado antes de indicar que al ser un animal joven y ser las fracturas limpias, en pocos meses «volverá a coger confianza» en las personas.
Este nuevo «padre» de Neymar le ha rebautizado como «Óscar» en «homenaje» al compañero que le avisó de lo sucedido («cuando hay un pasado negativo hay que romper con él»), aunque mantiene el primer nombre en las redes sociales porque ha abierto una colecta para ayudar a sufragar el tratamiento.
Después de la primera intervención, de 700 euros, en unos meses hay que someterlo a otra más para retirar la férula colocada (otros 700), a lo que hay que añadir gastos derivados del tratamiento y de la atención veterinaria.
Francés ha explicado que, con la ayuda de Asoka, que ha dado cuenta de lo ocurrido por las redes sociales, ha recibido algunas cantidades de dinero, concretamente 200 euros, de particulares de Alemania, que se añadirán a lo dado por los agentes que han actuado y a lo recaudado por otros compañeros de la comisaría provincial de Alicante que se han sensibilizado con la causa.
De esta manera, la situación de Neymar, ahora Óscar, ha sido ampliamente difundida en las últimas horas por medio de Twitter y Facebook, y si la recaudación excedieran de los gastos veterinarios, Francés ha manifestado que lo que sobre se donará a la asociación protectora Asoka a beneficio de otros animales.
Fuente: 20minutos