Por  Anyie Espinosa
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La diarrea en perros es un caso común de visitas al veterinario, por lo menos una vez en la vida los perros llegan a sufrir de diarrea ya que es un síntoma muy frecuente y común de muchas enfermedades.

El alimento que ingiere un perro tarda unas ocho horas en recorrer los conductos  que conforman su intestino así que normalmente el cuerpo absorbe la mayoría del agua que contiene la comida. La diarrea se produce como consecuencia de un cambio en la motilidad normal del intestino del perro lo que hace que desde la pared intestinal llegue líquido en exceso y como resultado habrá una reducción en la absorción de agua en la parte final del intestino delgado, o sea que el alimento recorre el intestino con una velocidad mayor a la normal sin dar tiempo al cuerpo de absorber los nutrientes y el agua por esto cuando nuestra mascota se dispone a evacuar, se encuentra con deposiciones que tienen mucho más agua de lo normal y que han permanecido menos tiempo en el intestino, siendo el resultado final la diarrea.

La mayoría de los casos de diarrea se curan sin necesidad de ir al veterinario ya que suelen durar poco tiempo. Es muy importante que el perro esté en ayuno durante 24 horas para esperar que la diarrea desaparezca así que debes retirarle el pienso o alimento seco y mantenerle agua pero que no tome en cantidades y cámbiala frecuentemente. En caso de que la diarrea no haya parado después de las 24 horas, contenga sangre, tenga vómito, presente dolor abdominal o hinchazón o si tu perro presenta fiebre y se encuentra decaído deberás llevarlo al veterinario inmediatamente.

Debemos intentar determinar la causa de la diarrea en nuestro perro, las causas usuales de la diarrea en perros se deben a los cambios bruscos en su alimentación (cambiar el pienso o alimento concentrado por otro repentinamente o cambiarlo por comida de sal de un momento a otro), la ingestión de alimentos en mal estado, basura y alimentos tóxicos para los perros. En otras ocasiones la diarrea se puede producir por ingerir objetos extraños, comer sobras o basura en la calle, hierba, arena, alergias, sustancias tóxicas, parásitos, bacterias y virus.

Cuando tu mascota esté mejor y se haya recuperado de la diarrea cuídalo dándole una dieta blanda para evitar irritar su estómago que sea baja en grasas, los veterinarios recomiendan darle algo de arroz, pollo y huevo hervidos, pero dale estos alimentos sólo si el perro no es alérgico a ellos. Aliméntalo con este tipo de dieta durante unos 5 días aproximadamente ya que con esto el estómago se recuperará permitiendo que las células del intestino se regeneren y alimenten pues esta se digiere mayormente permitiendo que las heces que se formen sean escasas, también recomiendan el agua de arroz para tomar. Es muy importante que dividas diariamente en varias raciones pequeñas la comida (3 ó 4 veces al día) y no te preocupes si los primeros dos o tres días tu perro no defeca ya que la nueva dieta se absorbe prácticamente en su totalidad generando pocos residuos. Poco a poco debes regresar a tu perro a su dieta habitual.

No olvides que debes consultar al veterinario todas tus dudas, si vas a darle a tu perro algún medicamento así sea un remedio casero procura preguntar primero a un especialista.