Más de 100.000 perros son abandonados anualmente en España. La prevención es fundamental.

 30 Millions d’Amis Foundation. «#Noleabandones». Agencia Buzzman, Francia.

El mundo de la publicidad está llena de perros felices, perros sanos y perros queridos por todas las familias sin excepción.

Cuantas veces hemos visto mascotas saltando locas de felicidad alrededor de sus dueños, engullendo un delicioso manjar como si no hubiera mañana o revolcándose en la hierba jugando con risueños niños.

Pero de vez en cuando toca recordar que no todo el monte es orégano y que este mundo tiene un lado muy oscuro.

Tener un perro en casa es un derecho, pero también es una obligación. Por una parte, cuentas con un animal que sabes que te brinda su amor incondicional, es leal, normalmente, cariñoso y siempre estará a tu lado pase lo que pase. Por otro lado, estás obligado a cuidarlo, alimentarlo, sacarlo a la calle, recoger sus deposiciones, mantenerlo limpio, sano y cuidar de él cuando sea mayor… Vamos, ser uno más de la casa.

 

ONG Blue Cross. «Con tu ayuda. las mascotas sobrevivirán». Agencia M&C Saatchi, Reino Unido.

Hay gente que por múltiples motivos cree que solo tiene perro para que le proporcione alegrías. Eso de las obligaciones son para otros. Así, cuando la mascota le causa más problemas de los que está dispuesto a soportar, prescinde de ellos como muebles viejos y chimpún.

Solo en España más de 100.000 perros son abandonados cada año, la mayoría de ellos a la llegada del verano. Sus causas, múltiples: el comportamiento del animal, camadas indeseadas, factores económicos, cambio de domicilio o incluso (más de un 10%) el fin de temporada de caza.

 Grandes almacenes Home Hardware. «Almacenamiento de mascotas». Agencia John St.,Canadá.

Afortunadamente, se empieza a tener conciencia de estos delitos y las Autoridades ya son sensibles actuando con firmeza (bueno, no siempre).

Por lo tanto, la tenencia responsable de animales obliga a unas reglas básicas muy a tener en cuenta antes de «comprometerte» con una mascota:

  • No lo abandones jamás. Si no puedes cuidarlo siempre, no lo tengas, nadie te obliga.
  • Si no quieres sorpresas desagradables esteriliza a tu animal, a menos que conscientemente quieras que tenga descendencia.
  • No hagas «regalos vivos». Regalar perros es una mala idea. Se trata de una decisión muy personal que cada uno tiene que tomar valorando pros y contras.
  • Considera siempre la adopción.

Por desgracia, y como ilustra este artículo siempre habrá historias a las que no se les podrá dar la vuelta por mucho que nos emperremos.

CHIQUI DE LA FUENTE