Con las buenas temperaturas, que hacen más agradable cualquier tipo de actividad, su vicio consiste en pasar el mayor tiempo posible en la calle, ya sea en la playa, el campo o incluso la ciudad. Por esto mismo no es de extrañar que tu mascota solo te pida salir (más incluso que la comida, ojo). Sin embargo, el motivo de buscar la calle no es solo jugar o corretear de aquí para allá, reside en el sol.
En efecto, probablemente tú también hayas notado que a tu perrito le encanta tumbarse a tomar el sol, y no tiene mal gusto, porque si hay un placer sencillo, es ese. Quizás al verlo tumbado tan feliz tú también te preguntes qué tiene para que le guste tanto, te contamos algunos de los motivos.
La vitamina D es beneficiosa para sus huesos (Istock)
POR QUÉ A LOS PERROS LES GUSTA TOMAR EL SOL
EL SOL RELAJA
Estar tumbado a una buena temperatura con el sol cayendo suavemente sobre la piel de forma natural hace que el animal se relaje y elimine la tensión, por lo que es una buena opción cuando el animal está nervioso o decaído.
DOSIS DE VITAMINA D
El sol es la principal fuente de vitamina D junto con algunos alimentos como el pescado o la leche. Esta vitamina ayuda a que se fijen sustancias como el calcio y el fósforo en los huesos haciendo así que el organismo se encuentre más fuerte y sano. Unos minutos al día tomando el sol con precaución resultarán de lo más beneficiosos.
AYUDA A PRODUCIR HORMONAS MUY BENEFICIOSAS
Al hilo de la relajación que comentábamos antes, el sol induce a nuestro cuerpo a producir diversas hormonas como la melatonina, que se encarga de regular los ciclos del sueño, o la serotonina, la llamada hormona de la felicidad. Ahí tienes la clave de que les guste tanto.
El sol les relaja (Istock)
MEJORA EL DOLOR DE LAS ARTICULACIONES
La mayoría de las razas sufren problemas en las articulaciones con el paso de los años que empeoran con el frío y la humedad, por lo que reposar al sol puede convertirse en una buena alternativa para mejorarlo.
LOS PROTEGE DEL FRÍO
En efecto, ya no solo hablamos de la primavera o el verano. En invierno es obvio que el sol es la principal fuente de calor en el exterior, así que es normal que tu perro quiera estar en contacto con él lo máximo posible.
Eso sí, por mucho que a tu fiel amigo le encante tomar el sol, si sabes que va a estar expuesto un largo periodo de tiempo no te olvides de aplicar protección solar porque, igual que sucede con las personas, puede producir quemaduras y cáncer de piel. Atención también con la deshidratación, procura que siempre tenga agua cerca.
Marta Benayas
