Los perros y las personas somos más parecidos de lo que la gente cree, al menos en cuestión de salud. Y es que son muchas las enfermedades que tanto los humanos como los canes podemos sufrir. Una de ellas es la depresión, que en perros suele deberse a una situación traumática que el ejemplar ha vivido en su entorno: la llegada de otra mascota, el nacimiento de un bebé, la pérdida de un miembro de la familia, los cambios en el clima, las mudanzas… Además, la depresión también puede estar relacionada con la sobreprotección, la falta de socialización o la escasez de ejercicio.
Hoy en Animal Mascota vamos a hablarte de los síntomas de la depresión para que puedas detectarla a tiempo. ¿Nos acompañas?
Inactividad y falta de socialización
Uno de los grandes problemas a la hora de detectar una depresión es que los síntomas pueden confundirse con el aburrimiento y el cansancio. Por eso, es importante estar muy pendiente del animal si se tiene alguna sospecha. Por ejemplo, debes estar atento a si deja de socializarse con otros perros tanto en la calle como en casa o si está inactivo.
Sueño y apetito
Por otro lado, debes tener en cuenta que los perros con depresión suelen experimentar cambios en sus hábitos alimenticios, ya sea comiendo menos e, incluso, dejando de comer, o haciéndolo de forma excesiva. De la misma forma, los canes deprimidos suelen dormir más, si bien es cierto que algunos no pueden conciliar el sueño al estar más inquietos y nerviosos.
Comportamiento extraño
Por último, debes estar al tanto de que tu mascota no se comporte de forma extraña, mostrándose demasiado nervioso, pegándose a ti de forma excesiva, escondiéndose durante micho tiempo, gimiendo, llorando, golpeándose contra las paredes…
Fuente: AnimalMascota